El día de hoy va a ser muy fácil de describir.
*Destino: Koh Tonsay. Conocida popularmente como la isla del conejo, se trata de un monte verde que emerge sobre el mar a unos 3 kilometros de la costa de Kep.
*Transporte: barco de pesca hecho en madera con dos motores y dos tripulantes. 
*Pasajeros: 9 blanquitos y algún camboyano.
*Hora de salida: tarde, como siempre! Hasta las 9:30 no nos hemos puesto en marcha.
*Duración de la travesía: 25 minutos. Mar en calma.
*Actividades: ninguna...
...aunque mucho 'colgado' solitario viene aquí a pasar la noche en uno de esos bungalows de paja, sin agua caliente, electricidad. Nosotros porque no había wifi, que si no...
Bueno, una actividad sí que hemos hecho y ha sido comernos unas cuantas nécoras a la parrilla con pimienta recién extraidas del agua.
...y después una siesta reparadora.
*Hora de regreso: las 4 de la tarde antes de que la mar se ponga más complicada...
Qué afición a la pimienta afrodisíaca!!!
ResponderEliminarOs traeréis kilos...
No nos dais ninguna envidia (ejem!!). Total, por las fotos, es igual que la ría... (más ejem!). Y el día que se abran las nubes como allí, seguro que el cielo está igual de azul.
Me voy a casa a llorar un poco.
No entiendo muy bien esta afición de enseñar los pies encima de la arena y mirando al mar...........y tampoco me queda muy claro si lo recién extraido del agua era la pimienta o las nécoras........, que seguro que están a tantos mil euros (¿con cerveza o vinito blanco?)
ResponderEliminarMenos mal que mañana es viernes(a pesar del Coso Blanco toca magia en Ezcaray) y que parece?? que sale el sol y llega el calor, que sino hacemos las maletas y nos vamos a esas abarrotadas playas camboyanas.
Ahora más en serio: me palantearia realizar un reportaje de este impresionante viaje y tratar de colocarlo.
Bilbaínos besitos.
...banana shake para acompañar...
EliminarHola Chicos,
ResponderEliminarQué Wifi , ni ná. Una noche en una isla paradisíaca sin "moderneces" es lo que os faltaba para redeondear este maravilloso viaje de neo- aventureros ( no se si existe este palabro) y nosotros podemos aguantar unas horas sin la "tortura camboyana " de vuestras vicisitudes.
No sé si empezar a comerle el coco a mi maridito... la envidia sana me puede .
Besitos.
P.D. La foto de las barcas muy muy chula.
Me temia este momento!! Playas de arena blanca, solito, piececillos descalzos... Parece un buen final para un estupendo viaje! Porque os tocara volver ya, no?? ;-)
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